"Broken Sword" es el nuevo juego de los creadores de "Lure of The Temptress" y "Beneath Steel Sky". Se trata de una aventura que cuenta con una presentación estilo película de dibujos animados y que me ha gustado mucho más que sus predecesoras.
La secuencia inicial introduce la historia rápidamente. George Stobbart, un joven americano, se encuentra visitando París, sentado en la terraza de un bar, relajándose con su café, cuando ¡BUUM! -- una pallaso hace explotar el lugar, matando al enigmático Monsieur Plantard. A partir de ese momento el futuro de George queda marcado, y decide perseguir al delincuente sin imaginarse que está a punto de embarcarse en una aventura que le llevará desde las alcantarillas de París a Irlanda, España, Síria y Escocia antes de que pueda resolver el misterio. En el camino conocerá la historia de los Caballeros del Templario y su fabuloso tesoro, y conocerá varios personajes que le ayudarán, le fastidiarán, y le intentarán matar. Puede que incluso encuentre el amor, si es que alguna vez consigue deshacerse del payaso.
Un inocente turista
George es un inocente turista, no inepto, pero sí algo ingenuo. Un personaje ideal para un juego donde el humor es bastante importante. Cuando jugaba, preguntaba a todos los personajes sobre todos y cada uno de los objetos del inventario simplemente vara ver qué decían, y en más de una ocasión mis risas se tornaban carcajadas. Incluso el pésimo acento francés del doblaje recuerda a la película "Monthy Python and the Holy Grail". Esta es una alegre aventura que no se toma a sí misma muy en serio y que no se esfuerza demasiado en ser divertida, pero que me ha proporcionado muchas horas de diversión.
"Broken Sword" es fácil de jugar y supone un regreso al estilo aventurero tradicional. Los puzzles son del tipo encuentra-el-objeto-y-úsalo-en-el-lugar-adecuado (que siempre han sido de mi agrado) algunos de ellos bastante sutiles. No demasiado retorcidos, pero tendrás que estar alerta a pistas en descripciones y conversaciones.
También hay un amplio rango de obstáculos "tradicionales". Algunos debes superarlos por ti mismo (por ejemplo manipulando varios objetos), mientras que otros dependen más de la conversación, o de la ayuda de otro personaje. Con esta aventura me divertí tanto que ni siquiera me molestaron el par de secuencias donde el tiempo es la esencia y sólo tienes uno o dos segundos para reaccionar.
Mira antes de actuar
La interacción con el entorno ha sido simplificada a través de un cursor que cambia de forma para representar la acción que puedes realizar cuando pasa sobre un "punto caliente" - una "boca" para hablar con otros personajes, una "mano" para coger un objeto y unos "engranajes" para mostrar que algo puede ser usado. Además, independientemente de la forma del cursor, un click con el botón derecho del ratón permite mirar primero antes de llevar a cabo la acción indicada. Esta característica ha solucionado uno de los problemas que más odio en las aventuras, los interfaces que activan un objeto antes de que uno esté ni siquiera seguro de qué es o qué debería hacer.
Las conversaciones son animadas, suelen ir al grano, y realmente permiten brillar al protagonista, George. Los diálogos hacen a los personajes, y, el juego que nos ocupa cuenta con un buen guión. Aunque hay algunas secuencias en las que no tienes ningún control sobre lo que se dice (usualmente las escenas que hacen avanzar la historia) una vez que inicias la conversación el modo cambia y tu inventario aparece en la parte superior de la pantalla y las personas o cosas sobre las que has descubierto algo aparecen representados por iconos en la parte inferior. Pulsa sobre un tópico de conversación y George preguntará sobre ello a su manera (no hay preguntas predeterminadas). Una vez has descubierto todo lo que puedes, puedes abandonar el modo de conversación para continuar la aventura. No es tan incómodo como suena y todo el proceso se ajusta suavemente en el juego.
El resto del tiempo el inventario está oculto pero puede accederse moviendo el cursor a la parte superior del área del juego que no es a pantalla completa. Mientras el inventario es visible puedes examinar más detalladamente varios objetos y modificarlos si es necesario.
Impresionantes gráficos
Los gráficos son alegres, claros y están bien realizados; además el juego ofrece un montón de lugares interesantes para explorar. La única queja que podría tener al respecto es que después de haber conseguido entrar en un par de yacimientos templarios, especialmente en Irlanda y España, fui rápidamente devuelto a París sin la oportunidad de explorar un poco por mí mismo - parece que George ya había tenido suficiente.
Broken Sword funciona en DOS o Win 95 y posee un amistoso programa de instalación que incluye, además, un pequeño machacaladrillos para que te distraigas durante la copia de archivos. Puedes instalar un mínimo de 18 MB en tu HD pero, si tienes espacio, una instalación media de 155 MB o completa de 200 MB es preferible. El juego viene en dos CDs que expulsa automáticamente sin ningún tipo de aviso cuando hay que cambiarlos - una opción que casi me mata del susto. Incluido en el paquete hay un libreto, 'Luchadores Salvajes', una breve historia de los Caballeros del Templario que proporciona información sobre el tema de la historia. No es necesario leerlo para jugar el juego, es mejor leer el manual, pero allí las letras son tan pequeñas que posiblemente tendrás que embarcarte en tu propia aventura en busca de aquella vieja lupa que no has visto en años.
Útiles opciones
Es posible cometer un error con horribles consecuencias en este juego (y te recomendaría hacerlo simplemente para ver lo que pasa), aún así, hay muchas posiciones para salvar la partida que permiten experimentar. Otra opción del juego es la de sacar por pantalla texto para todas las conversaciones y descripciones. Es divertido y no muy molesto, resultando útil para todos: para novatos y para jugadores experimentados que también saben disfrutar aventuras gráficas de este tipo.
Por alguna razón inexplicable Broken Sword está siendo vendido en algunos países como "Círculo de Sangre", posiblemente con la esperanza que la simple mención de la sangre hará subir el nivel de adrenalina de aquellos que buscan un juego violento. Esas persosas van a llevarse una decepción, mientras que aquellos que realmente disfrutarían el juego probablemente ni lo mirarán. Ironías aparte, "Broken Sword" me gustó y enganchó de principio a fin; lo acabé muy rápido y me quedé con ganas de más. Afortunadamente, y tras mirar los créditos hasta el final, descubrí que habrá una secuela. ¡Por favor!
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